¡Mercurio retrógrado en Leo! ♌️ Este fenómeno, que ocurre 3 veces al año en diferentes elementos (ahora en fuego), va del 18 de julio al 11 de agosto, retrogradando del grado 15 al 4 de Leo. No es para alarmarse ni para esperar exparejas (eso es más de Venus retrógrado). Compañías como Apple nacieron en retro, demostrando que es un momento para revisar y sacar del cajón proyectos artísticos o creativos pendientes.
Mercurio, regente de Virgo y Géminis, ilumina los procesos de cierre (Nodo Sur en Virgo) y la innovación en el lenguaje (Urano en Géminis). Nos invita a una comunicación consciente, buscando el equilibrio entre callar por evitar conflictos y el «sincericidio». Hay que discernir qué decir, dónde y cómo, para evitar somatizaciones o «colon irritable» en la comunicación. Es clave preguntar en vez de suponer, pues la falta de comunicación «da demasiado espacio para la imaginación» 💭.
Marte en conjunción con el Nodo Sur en Virgo revela la «guerra de los zombis» 🧟, invitándonos a abandonar hábitos automáticos y «muertos en vida» para hacer cambios importantes en nuestro modo de vivir y depurar rituales sin sentido. Es un momento para cuestionarse el cotidiano y reconectarse con la vida, encontrando la magia en los pequeños detalles.
La Luna Nueva en Leo del 24 de julio es una «nueva cosecha de conciencia», ideal para hacer consciente lo inconsciente y hacer foco en emociones primarias. El Cazimi (Mercurio conjunción Sol) del 31 de julio trae claridad y epifanías, revelando lo evidente que no se veía.
El trígono de Mercurio con Saturno y Neptuno (7 de agosto) nos permite revisar límites y viejas ilusiones con compasión, expresando las razones del corazón con solidez y acciones, no solo palabras. Se trata de discernir entre emociones y necesidades, evitando convertir las primeras en deberes. La oposición de Mercurio a Plutón en este periodo saca a la luz lo que el alma callaba, pero Saturno regula para evitar desbordes.
Para el 9-11 de agosto, un sextil Mercurio-Marte en Libra es ideal para cerrar acuerdos y buscar colaboraciones, la «unión hace la fuerza» 💪. Este Marte en Libra también restaura la energía de la justicia, equidad y empatía que había estado «apagada» en Libra desde un eclipse anterior.
En este periodo, también es vital revisar cómo buscamos atención: ¿con manipulación o expresando directamente nuestras necesidades de abrazo o caricia?. ¡Aprovechemos para hacer las cosas diferente y dejar de ser «zombis»! ✨
ÍNDICE DE IDEAS ABORDADAS
- La Retrogradación de Mercurio en Leo: Un Llamado a la Introspección y la Creatividad
- Desmitificando Mercurio Retrógrado: Más Allá de los Mitos Populares
- Mercurio y sus Regencias: El Vínculo con Virgo y Géminis en el Contexto Actual
- La Comunicación Consciente y la Liberación Emocional
- El Papel de Marte y el Nodo Sur en Virgo: Despertar de Patrones Automáticos
- La Luna Nueva en Leo: Un Nuevo Ciclo de Conciencia
- Aspectos Clave Durante Mercurio Retrógrado: Claridad, Límites y Alianzas
- La Restauración de Libra y el Poder de la Colaboración
- Aprovechando la Retrogradación: Oportunidades para la Reflexión y el Cambio
La entrada de Mercurio en su fase retrógrada en el signo de Leo, un evento que ocurre tres veces al año y cada vez en un elemento diferente, nos convoca a una profunda revisión de nuestra comunicación y expresión personal. Este año, el elemento es fuego, asociado con Leo , y la retrogradación se extiende desde el 18 de julio hasta el 11 de agosto. Mercurio comienza su movimiento retrógrado desde el grado 15 de Leo hasta el grado 4.
Es esencial desmitificar la percepción popular de Mercurio Retrógrado. A menudo se le asocia con el retorno de exparejas, una idea que, astrológicamente, se alinea más con una Venus retrógrada. Si bien algunos estudios sugieren fallas en la comunicación durante este período , la historia nos muestra que incluso la compañía Apple fue fundada con Mercurio retrógrado. Esto nos invita a cuestionar si realmente es un momento «malo» para iniciar nuevos proyectos, o si, por el contrario, es una oportunidad para revisar y consolidar lo que ya existe. Como el leño caído en el bosque tras una tormenta, este periodo revela los resultados de procesos que estaban en marcha. Al ser en Leo, signo de creatividad, es un gran momento para retomar temas artísticos o creaciones pendientes, y para revisar cómo buscamos o damos reconocimiento a través de la comunicación.
Mercurio es el regente de Virgo y Géminis , dos signos que actualmente están siendo profundamente tocados por los «factores del destino». Virgo, con el Nodo Sur, nos impulsa a cerrar ciclos y a soltar la compulsión por el control y el orden excesivo, aquello que ya tiene fecha de caducidad. Por otro lado, en Géminis, la entrada de Urano, un planeta transpersonal que no pisaba estos terrenos desde hace ochenta y cuatro años , marca una invitación a la innovación en el lenguaje y el pensamiento lateral. La retrogradación de Mercurio en Leo, un signo de fuego , fomenta la reflexión interna y la concientización.
En este período, la comunicación se vuelve un espejo de nuestras polaridades. Tendemos a callar para evitar conflictos o, por el contrario, caemos en el «sincericidio,» volcando todo sin importar el receptor. Un Mercurio en Leo nos insta a ser conscientes de «qué digo, dónde lo digo, en qué momentos, qué retengo y qué tanto estoy reteniendo una expresión». Reprimir emociones puede llevar a síntomas físicos o biológicos, mientras que soltar sin filtro puede generar un «colon irritable» en la comunicación. Este retrógrado nos ayuda a discernir entre lo que debemos callar y lo que es necesario expresar, buscando un balance esencial. La falta de comunicación da demasiado espacio para la imaginación , por lo tanto, si tenemos dudas, es mejor preguntar y no suponer.
La conjunción de Marte con el Nodo Sur en Virgo es un aspecto que revela la «guerra de los zombis». Se refiere a esas acciones y hábitos que realizamos de forma automática, «muertos en vida,» sin conciencia ni intención. Marte, como regente de Aries y símbolo de los inicios , en conjunción con el Nodo Sur, que representa los finales y lo que debe ser cerrado , nos invita a cuestionar estos rituales sin sentido y a generar cambios importantes en nuestro modo de vida. Es un momento para depurar hábitos, como la limpieza de los establos de Eneas, y reconocer la magia de los pequeños detalles que construyen el todo.
La Luna Nueva, el 24 de julio en el grado dos de Leo , ofrece una oportunidad para hacer consciente lo inconsciente. Leo, además del corazón, rige la vista. Es un momento para hacer foco en esa emoción primaria, muy arraigada, que estaba en el ostracismo. Esta Luna Nueva, además, hace un trígono a Saturno y Neptuno , lo que indica que se abordará con profundidad en un programa posterior.
Dentro de este recorrido de Mercurio retrógrado, varios aspectos son cruciales. Al inicio, un sextil con Venus en Géminis, invita a encontrar placer en el estudio y a incorporar nuevos conocimientos. Este aspecto también favorece conversar de forma desdramatizada y con sentido del humor sobre temas tensos en nuestras relaciones. El humor puede cambiar la tónica de la atención y generar complicidad. También es un periodo lúdico para conectar con nuestra faceta de niños. El sextil entre Mercurio y Venus en Géminis fomenta poner palabras a nuestros deseos de una forma creativa, humorística o irónica, y expresar con el corazón lo que sentimos sin tanto drama. Marte en Virgo, al estar en cuadratura a Venus, invita a ser preciso y quirúrgico con las palabras, aunque se debe tener cuidado de no caer en la crítica directa o el «sincericidio».
Hacia el 31 de julio, se da la conjunción partil entre el Sol y Mercurio, conocida como Cazimi. En este momento, el Sol puede «quemar» a Mercurio, haciendo que la forma de lo que se dice parezca más importante que el fondo o el contenido. Sin embargo, esta conjunción también es un gran momento para epifanías y para que la claridad revele lo que estaba oculto, aunque el proceso de asimilación pueda tardar por la retrogradación. La entrada del Sol en Leo, por primera vez con Plutón «definido» , le da una intensidad a los nativos de Leo, impulsándolos a la definición y a no quedarse en aguas tibias. Es importante para Leo saber con quién cuenta y con quién no, y alegrarse de la claridad que Plutón trae en este sentido. Esta claridad puede ser tan fuerte que encandila, revelando lo que era evidente pero no se veía.
Cerca del 7 de agosto, Mercurio retrógrado forma un trígono con Saturno y Neptuno, ambos también retrógrados. Este aspecto es una gran oportunidad para revisar la gestión de los límites con Saturno –especialmente los auto-límites del yo– y las ilusiones o idealizaciones de Neptuno. Es un momento para aterrizar ideas con compasión y amorosidad, y para expresar las razones del corazón con solidez, demostrándolas con hechos, no solo con palabras. Este trígono nos permite discernir entre emociones y necesidades, evitando convertir las primeras en deberes autoimpuestos que nos esclavizan. Además, la oposición de Mercurio a Plutón en estos días permite que lo que el alma estaba callando salga, pero la presencia de Saturno regula esta expresión, evitando un «bombardeo» o una expresión demasiado acaparadora.
Para el final del recorrido, alrededor del 9 al 11 de agosto , se forma un sextil entre Mercurio y Marte en Libra. Este es un excelente momento para cerrar acuerdos, conciliaciones y negociaciones. Marte en Libra, a menudo visto como el «guerrero de la paz» o el «Marte indeciso» , nos invita a revisar acciones pendientes y tomar decisiones, activando el «botón de encendido». Es ideal para buscar asociaciones y trabajar en conjunto, ya que la unión hace la fuerza y dos cabezas piensan mejor que una. Este aspecto también es crucial para la restauración de Libra. Un eclipse en octubre del año pasado dejó «apagada» la energía del grado 10 de Libra, asociada con la justicia, la equidad, la empatía y el reconocimiento de ideas diferentes. La entrada de Marte en Libra a partir del 22 de agosto , y el sextil con Mercurio, comienzan a darle energía y fuerza a esta zona, permitiendo que Libra se restaure y ejerza su derecho a existir.
En resumen, la retrogradación de Mercurio es una invitación a ir hacia adentro y evaluar las cosas con lentitud. Ha popularizado la astrología, llevando a cuestionar mitos como el retorno de exparejas (más propio de Venus retrógrada). Nos confronta con temas que hemos evadido, invitándonos a mirarlos desde varios ángulos en lugar de ignorarlos. Mercurio también rige la fase de aprendizaje, siendo un buen momento para hablar con hijos sobre lo que les sucede. Finalmente, con Leo siendo un signo que busca visibilidad y reconocimiento, este Mercurio retrógrado nos impulsa a revisar cómo estamos llamando la atención: ¿es con manipulación o con comunicación directa y honesta de nuestras necesidades?. Es una oportunidad para romper con los patrones de «zombis» y ser más creativos y disruptivos en nuestra forma de actuar y comunicarnos, dándonos la oportunidad de hacer las cosas de forma diferente a lo que siempre hemos hecho. Fuentes